Amigo invisible (mi cuaderno)

Como ya comenté en una anterior entrada, he participado en la tercera edición de Amigo Invisible de Ladrones de Cuadernos.

En suerte me tocó el "Ladron" Jose Antonio Pérez Dávila. Un estupendo dibujante de la cercana ciudad de Morón de la Frontera.

Pude comprobar por su blog que disfruta con los cuadernos  moleskine, por lo que conseguí uno tipo japonés, que intuí  le podía gustar...

Me propuse personalizar la portada con un dibujo vertical de mis casas. A rotulador y acuarela salpicada sobre papel de grabado.

En el interior, tras la dedicatoria y como primera página,  un dibujo con lápices de colores. 

Una columna rotunda con el nombre de mi amigo invisible y referencia a la edición de ladrones.

El dibujo central, a doble página, me suponía un problema. Confieso que tenía el cuaderno terminado a falta de este dibujo... Pensé ir a Morón, por la cercanía, y hacer un panorámica...

Pero he de reconocer que se me echó el tiempo encima....

Así que...

Cogí mis acuarelas, y me planté con un café por delante, ante la Capillita del Carmen. Y éste fue el resultado de un estupendo rato dibujero al solecito de la tarde...

Y si bien un dibujo más académico apetece de vez en cuando, no podía renunciar a mis casas dobladas, a los colores salpicados... Algo más libre, más a mi aire... Tomando referencias de "aquí" y "allá"...

Aquí os enseño una panorámica del cuaderno completo...

Al recibir el cuaderno, Jose Antonio procedió a compartir con el grupo la llegada del mismo. 

Aquí os dejo un enlace a la entrada que recoge las fotos y los comentarios cariñosos de los ladrones.

Y por supuesto, no se me olvida el estupendo cuaderno que recibí. Provenía de Barcelona y me lo envíaba Joshemari Larrañaga.  Un magnífico regalo hecho con mucho cariño. Aquí os comparto mis impresiones.

Participar en esta edición del Amigo Invisible de la web Ladrones de Cuadernos ha sido una experiencia tan agradable como enriquecedora.  

La complicidad de la pasión por el dibujo salta, por una vez, del ciberespacio a la realidad del cuaderno. La gente pone lo mejor de sus pinceles al servicio de una persona que no conocen... 

Un detalle especial que se espera con mucha ilusión.

Una idea genial que espero repetir el año que viene...

Y por cierto, con el regalo del cuaderno vino una invitación para participar en el blog y convertirme también en Ladrón... Así que... ¡ Allá vamos !